Como ya os informé es un colegio que tiene un nivel social y económico muy bajo. Por lo que pocos de estos alumnos reciben los valores que estamos acostumbrados el resto de los niños o las personas en general.
Todo ha comenzado cuando estaban jugando al fútbol, les fascina jugar a todos, tanto a chicas como a chicos, por lo que es una buena manera de fomentar el compañerismo. Antes de iniciar cada partido les advierto de que cualquier problema que haya, cualquier palabra mal sonante que escuche será motivo de expulsarlo durante 10 minutos.
Pues bien, dichos alumnos, tanto el A como el B ya habían sido expulsados una vez por intentar pegarse una patada. Al finalizar esos 10 minutos han seguido jugando y antes de subir a las clases ha sido cuando todo ha estallado.
El Alumno A alegaba que el B le había dicho cosas, y su única intención era pegarle. Sufría de un estado de nervios grande y de una ira y un rencor muy propio en estos niños.
Las pautas a seguir en este caso de pelea extrema han sido:
- Agarrar al que estaba más nervioso y agresivo.
- Hablarle y repetirle una y otra vez que me mirara a los ojos para que dejara de mirar al Alumno B.
- Decirle que se relajará y que me contará tranquilo porque había sucedido.
- Informarle de los castigos que iba a colocarle si no se calmaba.
- Subirlo a clase a él solo y hablarle tranquilamente hasta que finalmente ha recapacitado y se ha aflojado.
A continuación os dejo un vídeo para finalizar, sobre la agresividad infantil.
Material adquirido del canal de "guiainfantil".
Imagen descargada desde Google.
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